5 trucos que te ayudarán a elegir correctamente la talla de tu casco

Un casco debe ajustarse correctamente a la cabeza del usuario y mostramos 5 trucos muy fáciles para estar seguros de elegir la talla adecuada.

Un casco debe proteger la cabeza en caso de impacto. Esa y no la de ser un espectacular complemento estético debe ser su función. Por supuesto que resulta estupendo que además de proteger sea bonito y mejore nuestra imagen encima de la moto pero jamás hay que supeditar la estética a la protección.

En algunos casos, al probarnos el casco , no somos capaces de saber si se ajusta adecuadamente, si aprieta demasiado o si aunque baila un poco es el que nos conviene. Así que ahí van unos “tips” muy breves para tenerlo claro cuando lleguemos a la tienda y el comercial nos invite a probarnos el modelo de nuestra elección.

Talla correcta significa protección correcta

-Si con el casco puesto y abrochado éste sale o se queda a medio salir tirando desde atrás, desde la nuca, la talla es demasiado grande. Incluso los pilotos de competición -que usan cascos a medida- emplean por pura costumbre este truco antes de salir.

-En caso de duda es mejor que el casco apriete un poco a que baile ligeramente porque con el tiempo cederá algo. Sin embargo es muy importante recordar que aunque las almohadillas laterales cedan con el uso, las de la zona frontal no lo hacen, de modo que esa pequeña presión en la frente que apenas molesta al principio se convierte en una tortura insoportable al cabo de los kilómetros.

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-Entre el interior de casco y la sien no debe caber nada. Cualquier holgura en este sentido es un problema y cuánto mayor sea, peor porque además de menoscabar la seguridad entrará aire y lo hará más ruidoso.

-Los usuarios que llevan gafas no deben preocuparse porque la mayoría de marcas de cascos incorporan una ranura específica para que pasen por ella las varillas sin tener que comprar una talla mayor.

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-Prácticamente todos los fabricantes reconocidos ofrecen la posibilidad de ajustar las almohadillas interiores del casco en función del tamaño y forma de la cabeza.

El truco japonés para ajustarse el casco

Los usuarios japoneses -no olvidemos que los principales fabricantes mundiales de cascos motociclistas son nipones- recurren a un sencillo truco para saber si su casco está bien ajustado. Consiste simplemente en colocárselo y mirarse al espejo para estar seguro de centrarlo correctamente en relación con las cejas y las nariz. El casco debe permitir dejar un par de dedos de separación por encima de la parte superior de la ceja y su borde inferior debe cubrir parte de la nariz.

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