La llegada de un nuevo modelo GT de SYM es siempre interesante para el segmento scooter no en vano la marca de Taiwán se ha consolidado ya como uno de los Top Five entre los especialistas de este tipo de vehículos.
En este sentido, el nuevo MaxSym 400 GT llega para sustituir al anterior modelo ofreciendo en esencia lo mismo -es decir gran espacio habitable, buenas prestaciones, gran comportamiento dinámico, alta calidad de acabados y una cierta elegancia atemporal- aunque convenientemente mejorado y renovado.
En un momento del mercado en que la batalla parece librarse en el equipamiento, SYM nos propone un modelo que tiene todo lo necesario para quienes desean un Conmuter de primer nivel pero nada más que lo necesario. Eso quiere decir un buen sistema de frenos ABS, un buen control de tracción, una parte ciclo ágil y que puede con todo y un completo cuadro de instrumentos además de un parabrisas regulable en altura manualmente y sin herramientas.

Como nos explicaban en la presentación, en SYM confían tanto en las cualidades dinámicas de su modelo que creen que estas bastarán para convencer a los potenciales compradores más allá de que tenga o no unos u otros gadgets electrónicos más o menos pintorescos.
Y para demostrarlo nos llevaron a la cuna del vino de Ribeiro, la Ribera Sacra, cargada de paisajes maravillosos y de carreteras diabólicas. El mensaje era muy claro: si el MaxSym puede ofrecer tanta agilidad, estabilidad y seguridad en estas carreteras húmedas, retorcidas y de asfalto castigado imaginad cómo se comportará en una gran avenida urbana. Y en ese sentido la propuesta de SIM no engaña; el 400 GT es de lo mejorcito dinámicamente que he probado en meses entre potenciales competidores.

A pesar de su cilindrada y de su imponente volumen se siente ligero, maniobrable, con una parte ciclo que permite un uso casi motociclista y confortable para todo tipo de usuarios. La pregunta que hay que hacerse y que también se hacen en SYM es si esto bastará para convertirlo en el referente que podría llegar a ser frente a otros modelos dinámicamente también muy buenos y además cargados de ayudas electrónicas y cachivaches personalizables de todo tipo. El MaxSym 400 es un scooter GT para muy cafeteros; para aquellos que valoran este comportamiento dinámico excelente la seguridad y el aplomo en carretera por encima de otros conceptos.
El valor está en lo dinámico
De hecho el dejarlo probar y que el cliente potencial descubra un 400 ágil casi como un 250 o un 300 será la clave de su venta. Este factor, junto a sus buenos acabados, un cofre bajo el asiento en el que podría vivir una familia y unas prestaciones que permiten velocidades de crucero acordes con esa G y esa T deberían bastar para convencer al más pintado. Por el contrario si se trata de valorar la relación de precio/equipamiento que ofrecen otros modelos de ese segmento, el MaxSym juega en clara desventaja, sobre todo porque también su precio se coloca algo por encima de estas otras propuestas. Para muchos la fiabilidad y la trayectoria de SYM y el impecable servicio postventa del grupo Motos Bordoy compensarán esa diferencia… pero es un riesgo que el modelo asume y que incuestionablemente algunos pondrán por delante de un comportamiento dinámico sobresaliente.

Pero nuestro trabajo no es -obviamente- decirle a la gente qué debe o no debe comprar. Cada uno tiene sus gustos y sus circunstancias -todas respetables- y en MotosX1000 nos limitamos a explicar que el motor del nuevo MaxSym 400 GT ha sido revisado para cumplir con la exigente normativa de emisiones de gases Euro 5+. También el diseño general ha sufrido un notable restyling destacando los nuevos grupos ópticos delantero y trasero que cuentan con iluminación full led. La instrumentación es ahora totalmente digital gracias a una pantalla LCD a color de 6 pulgadas. El asiento -finalmente- es mucho más confortable y ergonómicamente ajustado para viajes más largos. Además su altura respecto al suelo se ha rebajado hasta los 780 mm del suelo, lo que facilita las maniobras en parado de un conjunto que pesa 215 kilos y el acceso a todo tipo de usuarios.
Un motor brillante
El propulsor monocilíndrico de 399cc -y hay que resaltar que el SYM es realmente un 400 a diferencia de otros competidores que son “trescientos y pico”- desarrolla una potencia de 34 CV a 6.750 rpm y un par de 38,1 Nm a 5.250 rpm y es toda una garantía de fiabilidad. De hecho apenas se conocen problemas en garantía de este motor desde su llegada a nuestro mercado incluso en su primera versión. Acelera con alegría desde abajo y recupera desde cualquier régimen. Y lo hace, además, de un modo tan suave y silencioso que lleva a confundir sobre su verdadero carácter. Porque no hay que olvidar que es un motor GT y basta buscarlo para encontrarlo.

Sobre todo porque lo acompaña una parte ciclo que, como hemos dicho, es lo mejor de este vehículo. Mantiene el aplomo incluso en la conducción más exigida gracias igualmente a un compromiso de tarado de la suspensión muy bien encontrado.
Cambia de dirección con soltura, apenas se mueve en los virajes más rápidos y funciona sobre railes. Insisto: de lo mejorcito dinámicamente que puede encontrarse en su segmento.
El ABS y el control de tracción con nuevo mapeado permiten tirar de frenos con confianza pese al asfalto permanentemente regado de esa lluvia gallega que tanta falta haría en otros lares.
Lo que vale la pena
Que el equipamiento sea su talón de Aquiles respecto a otros competidores a los que sólo les falta incorporar de serie sandwicheras y portadrones-y con eso no pretendo descalificar la presencia de gadgets ¡cuidado!- no quiere decir que este SYM no tenga mucho que ofrecer. De hecho tiene absolutamente todo lo necesario -y recalco necesario- que debe tener un GT de primer nivel. Sistema Keyless, frenada preventiva de emergencia que hará parpadear la luz trasera al realizar una frenada fuerte por encima de 70 km/h y como hemos dicho un parabrisas regulable muy fácil manualmente.

De la capacidad de carga se ocupan un cofre en el que caben dos cascos integrales compactos y dos guanteras en el contraescudo con enchufe USB 3.0 para carga rápida del móvil. Y un detalle que es de agradecer y los fabricantes parecen haber olvidado: un práctico freno de posición al desplegar el caballete lateral. ¡Que cunda el ejemplo!
¿Quién decidió que un freno de estacionamiento no es funcional en un gran scooter?

El precio del SYM MaxSym 400 GT es de 6.499 euros e incluye el seguro gratuito durante el primer año para mayores de 21 años, estando disponible en colores blanco y en gris azulado
Hace solamente dos años, con ese precio y ese comportamiento dinámico, el MaxSym 400 GT se hubiera convertido inmediatamente en el ejemplo a seguir en su segmento. Hoy, con propuestas competidoras mejor equipadas y más baratas -quizás no tan brillantes en carretera pero igualmente muy buenas- le va a tocar pelear duro. Su mejor argumento para lograr la consideración que se merece será justamente eso: lo extraordinariamente bien que va en carretera.
Al fin y al cabo es eso justamente lo que se busca en un GT ¿no?

















